Cuando el futuro llama: así cerró Sergio Pérez su prueba con Cadillac Racing en Imola.
Sergio Pérez completó la segunda jornada de test en el circuito de Imola con Cadillac, cumpliendo un programa exigente e intenso junto a Ferrari y dejando señales claras de que no ha perdido el ritmo a pesar de los cambios.
11/15/20252 min read
Checo Pérez completa un sólido segundo día de test con Cadillac en Imola.
Sergio Pérez cerró en Imola su segunda jornada de pruebas con Cadillac dejando sensaciones positivas y datos relevantes para el desarrollo del proyecto. El mexicano cumplió con un programa exigente, en un ambiente de trabajo conjunto entre Cadillac y Ferrari que marcó el pulso de un día clave para la escudería estadounidense.
Cadillac avanza en su programa y Pérez aporta kilómetros valiosos.
Cadillac completó con éxito su primera fase de test y lo hizo con un acumulado total de 903 kilómetros en pista. Dentro de esa cifra, Sergio Pérez firmó 91 vueltas, suficientes para ofrecer al equipo una lectura inicial sólida del comportamiento del monoplaza en condiciones reales.
El día transcurrió bajo una dinámica de colaboración directa entre el personal técnico de Cadillac y Ferrari, una sinergia que permitió ejecutar ajustes con rapidez y mantener el plan previsto sin interrupciones. La presencia del equipo italiano aportó experiencia y estabilidad en una jornada en la que el programa de pruebas no dejó espacio para improvisaciones.
Pérez protagonizó su stint más importante con un long run de 24 vueltas utilizando neumáticos duros. Durante esa tanda, mantuvo un ritmo medio de 1:22.476, una referencia constante y útil para analizar degradación, balance y rendimiento en distancia prolongada. Más temprano, el mexicano había marcado su mejor giro del día: 1’17’’27, un registro que cobra valor por haberse logrado con pista fría y compuesto duro, lo que deja margen para mejoras con gomas más blandas.
La actividad terminó antes de lo habitual. A las 15:11, Pérez realizó su última entrada al garaje y el equipo dio por concluida la sesión. Con los datos en mano, Cadillac confirmó que el desarrollo marcha según los plazos establecidos: el encendido oficial del coche está programado para diciembre, mientras que el primer rodaje formal del monoplaza tendrá lugar en enero.
Tras dos días de pruebas, el balance interno es positivo. Pérez mostró adaptación inmediata, el auto respondió dentro de los parámetros esperados y el proyecto avanza hacia su siguiente fase con una base técnica más sólida. Cadillac continúa construyendo su futuro, y el piloto mexicano ya figura como pieza clave en ese proceso.


